El tambor es extraíble de la máquina con extrema facilidad para las operaciones de limpieza, gracias a las guías que protegen el tambor mismo.
Detalle del árbol despalillador en acero esmaltado que efectúa el despalillado (comprimiendo los granos de uva en el tambor).
El chasis está dotado de dos guías que montan el tambor; éste desliza en las dos guías cuando se extrae.
Arriba hay una plataforma extraíble realizada en acero esmaltado, que generalmente se desarma para operaciones de limpieza y de mantenimiento. La plataforma cierra el tambor superiormente. De esta manera todos los granos de uva que se encuentran adentro, se trabajan perfectamente, quedando prensados en el interior y por lo tanto empujados hacia el tambor gracias al árbol despalillador.