La cortadora de fiambre profesional Celme PRO 300, fabricada en Italia, es la elección perfecta para entornos comerciales como restaurantes, carnicerías y charcuterías.
Fabricada en aluminio fundido a presión pintado, esta máquina presume de una construcción robusta y duradera. Su superficie, tratada con el proceso MAT conforme a las normas Moca de contacto con alimentos, ofrece una resistencia superior a los arañazos y una gran facilidad de limpieza, lo que reduce la necesidad de un mantenimiento frecuente.
El plato cubrecuchilla y la vela son de aluminio, lo que reduce la corrosión y la oxidación.
La cortadora de fiambre Celme PRO 300 cumple con la normativa profesional CE e incluye varias medidas de seguridad, como un interruptor de dos botones con rearme y una protección térmica para su motor eléctrico de 220Wy 230V. El motor silencioso y ventilado garantiza una larga vida útil del aparato.
Sus funcionalidad incluyen:
- Una cuchilla de 300 mm de acero templado y cromado, con ranuras antiadherentes para cortes precisos y limpios, resistencia a la corrosión y menor necesidad de mantenimiento
- Un disco cubrecuchillas de aluminio, fijado con un tornillo trasero
- Un afilador fijo de esmeril doble, que garantiza un afilado constante de la cuchilla, con un plato extraíble para facilitar la limpieza
- Un plato en aluminio anodizado sobre rodamientos de teflón permite movimiento suave y estable
- Un carro extraíble, con dispositivo de bloqueo de la vela, conforme a las normas de seguridad
- Un empujador con puntas removibles para una fácil limpieza
- Una perilla para ajustar el grosor de corte de 0 a 16 mm
- Un sistema de transmisión por correa.
Con unas dimensiones de 55x41x42 cm y un peso de 16 kg, la cortadora de fiambre Celme PRO 300 es ideal tanto para uso profesional como doméstico, ya que combina robustez y practicidad.
Ideal para cortar carne, embutidos, verduras y queso.