El cargador de baterías portátil con función de arranque es una herramienta esencial, útil para una gran variedad de aplicaciones.
Compacto y fácil de transportar, es adecuado para diversas situaciones, especialmente para la carga rápida y segura de vehículos y equipos. Una característica clave es el selector de corriente de carga, que permite al usuario elegir la corriente adecuada para una carga eficaz.
El amperímetro incorporado supervisa la corriente durante la carga, añadiendo un nivel crucial de control.
La seguridad es una prioridad: la protección termostática evita daños por un arranque prolongado, mientras que un fusible interno protege contra cortocircuitos e inversión de polaridad.
Técnicamente avanzado, el aparato tiene una tensión de entrada de 230 V a 50/60 Hz y una potencia de 650 W.
Admite una tensión de batería de 12 V a 27 A, con una corriente de carga máxima de 18 A a 24 V.
Produce hasta 220 A para arranques de emergencia y 135 A nominales, con baterías de hasta 270 Ah a 15 h.
De práctico tamaño 235x220x335 mm, su peso neto de 10.7 kg kg la hace manejable.
2 posiciones de carga más la función boost aumentan su versatilidad, convirtiéndolo en un accesorio indispensable para múltiples necesidades.