Con la llegada del buen tiempo hay un gran deseo por parte de todos de embellecer su jardín con flores ornamentales, pero también de crear un pequeño huerto para tener su propia producción de verduras de temporada. Todo esto requiere el uso de una herramienta cómoda y práctica, dedicada a estos fines: la sembradora.
Una conveniente sembradora puede ser una solución práctica a muchos problemas de jardinería.
Aquí está una breve lista de los principales factores a tener en cuenta antes de comprar estas máquinas:
Este tipo de sembradoras, a pesar de su nombre, no siempre se mueven por empuje, su nombre deriva del hecho de que requieren ser conducidas como si las empujaras.
Estas máquinas son a menudo autopropulsadas gracias a las ruedas montadas en el chasis, pero también pueden ser manuales, resultando más ligeras y prácticas.
Gracias a su funcionalidad, es posible sembrar una cantidad considerable de semillas de manera totalmente profesional.
Las sembradoras de empuje excavan un pequeño surco y luego depositan una cantidad precisa de semillas, según el ajuste del operador.
Se trata de modelos más sencillos que los de empuje, que constan únicamente de un tubo de mano por el que descienden las semillas.
Son más económicas y se adaptan a las necesidades de todos los usuarios, permitiendo controlar más las semillas a plantar.
La eficacia de las distintas máquinas utilizadas para la siembra puede medirse de varias maneras, como el tiempo y el esfuerzo que permite ahorrar y las semillas que no se gastan durante el proceso.
Las sembradoras pueden incluso ajustarse antes del trabajo, es decir, el operador puede regularlas según sus necesidades, ya que sobre todo los modelos más baratos utilizan medidas establecidas por el fabricante.